martes, 9 de octubre de 2012

Yo vine porque quise y además me pagaron.


Pasó el 7 de octubre y pasó lo que pasó, este no es el momento simplificar las cosas, el peor de nuestros temores se hizo realidad, la elección del domingo no era simplemente un cambio de presidente, resulto siendo la ratificación del proceso que al profundizarse pretende convertirse en irreversible y tal como están las cosas hoy, está a 90 días de lograrlo. Observado lo sucedido, buscar las razones del triunfo del Comandante Chávez debe ser materia de estudio por parte de expertos, pero como me siento afectado directamente me permito opinar por todos los medios posibles mientras existan. Los días previos al evento electoral una cantidad enorme de especialistas se presentaron en todos los canales y especialmente en Globovisión para convencernos de la seguridad del sistema electoral, "El voto es secreto" cosa que no pongo en duda, "No hay posibilidad de alterar el resultado" premisa que también doy por válida, así que  la tesis de "Fraude" está descartada, hay poco más de 8 millones de venezolanos que votaron por el Presidente Chavez y a pesar del crecimiento de la oposición, si tomamos como referencia la elección presidencial del año 2006, donde apenas sacamos 4.300.000 votos, hoy con 2 millones de votos más no nos alcanzo para vencer a la opción del continuismo  la cual apenas sumo en 6 años 700 mil nuevos adeptos. Visto desde esta óptica hemos ganado mucho terreno y si las tendencias se mantienen en 6 años no hay manera lógica para que la revolución se mantenga en el poder, el problema está que la lógica y la política no siempre van de la mano, El Presidente Chávez y su revolución están consientes de estos números y desde el "Balcón del Pueblo" en su discurso de victoria advirtió "El que voto por mi voto por el socialismo" más claro no canta un gallo, lo que viene es una aceleramiento sostenido para llagar al punto de no retorno en cuanto al sistema socialista y para ello debe no solo conservar los espacios con los que hoy cuenta, sino conquistar el único nicho donde la oposición puede demostrar que es eficiente, Las Gobernaciones y Alcaldías, eso está a la vuelta de la esquina, tan cerca que de nuestra reacción depende la democracia, pero ahora bien, ante tal empresa, ¿qué debemos hacer? Capriles en su última entrevista como candidato ante la pregunta ¿Qué le falto a la campaña? respondió "Tiempo" él, que recorrió el país como nadie la ha hecho en los últimos 30 años, estaba claro que de haber tenido más tiempo se podía hacer más, pero creo a mi entender que no fue solo eso lo que falto, quedo claro que la conexión religiosa y el lenguaje con la clase más pobre es a punta de billete, El Candidato opositor en su recorrido se dio cuenta de ello, por eso el ofrecimiento de aumentar el salario mínimo a partir de enero, pero en campaña hablamos es de dinero en mano y no de promesas, Esto sonara feo para algunos oídos sensibles pero estoy cansado de tener consideraciones con los chavistas cuando la realidad son un grupo que solo defiende sus llamadas "conquistas colectivas" que de colectivas no tienen nada ya que son individualísimas, repartidas en actos públicos y esto lo sabe el gobierno, ese gobierno al cual se enfrento gallardamente Capriles. Después de la caída es más fácil ver la piedra así dicen los abuelos, pero es aquí donde creo que se erro en la campaña, Cuando nosotros hablábamos de los servicios y sus deficiencias a los más pobres eso los tiene sin cuidado y a las pruebas me remito:
1) Inseguridad: se origino en las barriadas y cerros, pero solo fue un problema cuando llego a las urbanizaciones y centros comerciales.
2) Luz: hablamos de los apagones en un país donde más del 30% de la población se la roba.
3) Agua: Ni siquiera en las grandes capitales el suministro es constante, mucho menos en las barriadas y cerros periféricos a estas y en el interior del pais ni hablar.
4) Escases de alimentos:  En los  pueblos del interior siempre ha existido.
5) Salud: los hospitales siempre han sido deficientes y mal administrados.
6) Vialidad: Los ricos son los que tienen carro.
7) Salario Mínimo: Solo en 35% de la población laboral tiene un trabajo formal.
Chavez consciente de esto hablo claro: "nada de esto es importante, lo importante aquí es la Patria" o sea YO, Que les pongo un Barrio Adentro, Mercales, Les regalo electrodomésticos y si tienen suerte cual KINO le pongo una casa algún día.
Como ven el discurso opositor sigue siendo hacia la clase media y Chávez le habla al pueblo, billete en mano, tanto así, que a los empleados públicos (ministerio de Interior) les pago el Jueves 4 pasado el 50% de las utilidades, ahí les dejo esa. Chavez es amo y señor de los pobres en Venezuela, mas allá de las cadenas, abusos gubernamentales y ventajismos legales.
7  días antes de las elecciones asistí con mi familia a la Avenida Bolívar al cierre de campaña de Capriles, Disfrute como nadie de Yordano, y luego de Caramelos de Cianuro, luego se monto Capriles dando un discurso más largo que de costumbre, tanto que la gente empezó a irse y esto tiene una explicación, Todos los que estaban allí no quieren largos discursos como lo de Chávez, Quieren es salir de Chávez. Esa noche cuando llegue a la casa, hable claro con mi familia, "Con la demostración de Caracas no ganamos las elecciones, allí había pura clase media, marcas, cachuchas compradas, camisas de diseño y tercera edad llevada por sus hijos profesionales, y hasta de la batalla de Lepanto había pancartas, los cerros no bajaron" el día que Caramelos suene en los cerros tanto como Tito Rojas, podrá ser. Esto se acabara algun día, y desde ya los especialistas, políticos y profesionales debemos pensar en formulas diferentes para llegar a estos sectores.
El reto más grande que tiene Capriles es demostrar que es el verdadero líder de la oposición contra un estado con pretensiones totalitarias. A pesar de todo este panorama desesperanzador, nuestro lugar es quedarnos en la lucha, es verdad que irse es más fácil para algunos, pero eso es lo que quieren desde el gobierno para mantener con buena salud la revolución.
Finalmente ofrezco mis disculpas por creer que si se podía en esta oportunidad, pero al ver la alegría de mis hijas ante la posibilidad de adentrarnos en una mejor Venezuela, me contagie de su entusiasmo, les confieso mis queridos lectores que por primera vez no vote contra alguien, vote por un líder que nos enseño que hay un camino y en él me seguiré manteniendo, mientras tanto, para las próximas concentraciones del gobierno le propongo a sus seguidores en medio de tanta dignidad patriótica la siguiente consigna, más acorde con su realidad: "Yo vine porque quise y además me pagaron" seguro yo no estaré entre quienes estén gritando. Me despido no sin antes recordar que Aun Hay Un Camino.