¿Sera que me lo juego?

       En este mundo de encuestas, fotografías instantáneas y de frases descontextualizadas, desde que tengo uso de razón, el numero de mala suerte fue el 13, cifra peligrosa hasta para pronunciarla en público, nunca falta un gracioso con aquello de “Mientras más Alemanes…” 13 eran los comensales en la ultima cena, por allí es que me suena lo de la mala suerte, para los latinos el 13 combinado con el martes es de temer y el día de mala suerte para los anglosajones es el viernes, por aquello de que fue un viernes que crucificaron a Cristo. Todo lo anterior no deja de ser superstición, últimamente hemos tenido tragedias, accidentes y el famoso numero no lo relaciono, por lo menos no directamente. Esta mañana en un diario de circulación nacional leí una cifra que me llamo la atención: “52% de las carreteras están en mal estado” esta cifra sí que es peligrosa, sobre todo cuando caemos en cuenta de que estamos en un mundo al revés, de hecho tenemos una Asamblea donde los que sacaron el 52% de los votos no son mayoría, las contradicciones son tales que vemos a médicos que te dicen “52% de los fumadores desarrollara alguna enfermedad relacionada con el tabaquismo”, pero ellos fuman, allí está el numero otra vez. En días pasados me tropecé con un trabajo de una empresa encuestadora que concluía: “52% de los venezolanos no creen que se realizaran las casas prometidas por el gobierno” y es que este número gusta cuando queremos convencer a la gente, “52” fue la última publicación hecha por DC Comics® en 2006 y después no ha hecho nada, ya no gustan las comiquitas, ¿y entonces? ¿52 es bueno o malo? ¿Sera que me lo juego? Mientras pensaba en el numerito de la suerte, en televisión veo que La Agencia Bolivariana de noticias publico un trabajo de Jesse Chacon y su Grupo de Investigación Social Siglo XXI (GIS XXI).  “Un 52% de la población aprueba gestión de presidente Chávez” a esta gente si le gusta caerse a embustes (pensé), al mismo tiempo por twitter® me llega “existe mas probabilidades de sufrir un accidente mortal camino a la lotería que ganar la misma.” Ahora está más que claro,  a la gente le gusta el juego y le gustan las cifras, pero como puede ser esto posible si yo vivo escuchando frases como  “La matemática nunca fue mi fuerte”, “en la escuela, odiaba las cuentas”, “no me hables de números, yo soy de letras”. A veces la persona con la que charlamos llegan a vanagloriarse de que no tiene ni idea de la matemática y que le basta con sumar y restar.  Investigo un poco y resulta que este comportamiento forma parte de cierta corriente social donde está bien visto declararse analfabeto en cualquier cuestión relacionada con las ciencias. Algo sorprendente, pues a nadie se le ocurriría sentirse orgulloso de no saber quién era Borges, Cervantes o Gallegos. No queda de otra, a este pueblo no lo vamos a convencer de que no juegue su numerito y tampoco lo convenceremos de votar por alguien con cifras en prensa. El gobierno acaba de prometer 2 millones de casas para el 2019, en 8 años tendré 52 si Dios quiere, sería un milagro que ganara la lotería ya que no juego, pero la decisión está tomada, como dice un amigo “Aquí lo que hay que hacer es hacer.” En el año 13 de este gobierno, tendremos la oportunidad de hacer valer el 52% que dicen las encuestas que tenemos y así no esperar a mi cumpleaños 52 para ver si nuestro gobierno nos cumple. Hasta la próxima cifra…